16 jun 2010

Escuchar.por Alicia Garrigó




Escuchar es un ARTE, que en la era de la comunicación,tiendo a pensar que se pierde, con la urgencia y la prisa.

Pero hay otros grandes enemigos de la escucha atenta , sencilla “planera” el olvidarse de uno mismo para entregarse al otro, para ponerse en la piel del otro, en lo que le duele, en lo que le sangra…

Las palabras, son la música de las ideas, y del ingenio, son las llaves del alma, de los que, nos las otorgan, son intenciones de contactar con nuestros sentidos.

Las palabras cautivan a las personas sensibles, en un cautiverio de fonemas audibles, las personas auditivas las adoramos, al oírlas y al escribirlas, los dedos sobre el teclado imprimen en la pantalla los sueños y pensamientos ideas y sentimientos que cobran vida entre el blanco y el negro, el código lo conocemos y a menudo,  solo son, una colección de signos que no queremos interpretar.

Nos hablan los silencios, los gestos , los colores, las sonrisas los ojos, los olores…

¿Pero quien escucha?

Escuchar es un ARTE, donde abandono mis pensamientos para entregarme a los tuyos, no te interrumpo, me lleno de tus palabras , solo para entenderte, no voy a contestarte ni a reclamar Mi RAZON, no voy a enseñarte NADA, no soy tan lista para dar lecciones , solo una aprendiz de ESCUCHANTE.

1 comentario:

  1. Para poder practicar la escucha debemos estar preparados para oir todo lo que nos llega, nos guste o no, lo compartamos o no, lo entendamos o no.
    Ahora nos hemos puesto todos a reflexionar. El acto de valentía comenzó con un artículo en Peña Ramiro y a raiz del mismo, nos hemos subido todos al carro de la reflexión. ¿Pero por qué no un poco de autocrítica? Como casi nunca se produce, explicaré mi parecer.
    Comencemos por Peña Ramiro. En ocasiones publican comentarios que atacan a otros blogs. Podrían ser algo más cuidadosos en este menester.
    Acla o el sentimiento de estar permanentemente atacados. Acla es un blog excepcional, pero debería tener unas miras más ámplias y dejar de pensar que todos van en su contra, cunado cada uno va a la suya. Cuando cambien esta percepción todo irá mejor.
    Alicia, cuando te da no paras de mandar mensajes subliminales y en ocasiones directos a Peña Ramiro. ¿Por qué? Tu sabrás. Tienes, conjuntamente con Acla, una obsesión que puede llegar a enfermiza sobre si son un grupo, colectivo, amiguetes, piratas o un tejido asociativo. ¡Qué más da!
    Luego aparecen otros liberados que se lanzan al ruedo mandando mensajes de paz y amor (desde la pedrosa y cosas así) y a renglón seguido disparan con bala directo al corazón.

    Como podrás ver, somos una fauna variada y divertida. En el fondo sabes que nos pasa? Lo mismo que al resto del país, que preferimos los episodios de tomate y tómbolas a otro tipo de cosas más serias.

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